viernes, 1 de abril de 2016

El sueño de los tubos

La pequeña Otra soñó y luego nos contó. En cierto lugar nos encontramos unos tubos que eran una especie de túneles por los que era posible deslizarse. Eran también la muerte. Si entrabas a los tubos, morías. Entrábamos. Estábamos muertos pero juntos en un lugar extraño, de suelo color rojo. Sabíamos que estábamos muertos y también cansados. A la pequeña Otra le dolía un poco la panza. En ese lugar había otros tubos, más pequeños. Si entrabas en ellos te volvías nada. Justo eso: nada. Sabíamos que estábamos cansados y que estaba bien entrar a esos nuevos tubos. Dejaríamos de estar cansados, dejaría de doler la barriga. Tranquilamente decidimos entrar. Entramos. Nos volvimos nada