martes, 31 de diciembre de 2019

Degenerado


De pronto Ariana Harwicz se me ha vuelto necesaria. Cada una de sus novelas me perturba y me invita a escribir aunque nunca logre hacerlo como ella. Degenerado es un coro de voces sobre la que resalta una, la de un hombre acusado de abusar sexualmente de una niña y luego matarla. ¿Qué hay en una mente así? Leer la novela es asomarse a esa oscuridad, pero no solo a la de ese hombre sino también a la de un mundo que lo convirtió en eso. La maravilla de Harwicz es que logra contar eso con un lenguaje poético tan denso que cada palabra pesa. Poesía del horror. Despiadada.

domingo, 27 de octubre de 2019

Inventos modernos.


¿Es posible contar el desarrollo de la civilización con las patas de una silla, una tabla, un patín de los viejos, un acordeón de juguete y una artesanía? Quizá es posible. ¿Es posible hacerse la pregunta de si es más importante la mente o el cuerpo con un muñeco de madera? Quizá es posible. La hermosa y extraña obra de La Liga-Teatro Elástico se atreve y lo hace con una belleza poco común: la belleza de la imperfección; con un sentido del humor con restos de nostalgia, y sobre todo con poesía; no cualquiera, sino esa que se puede encontrar, si sabe descubrirse, en objetos viejos, olvidados y anacrónicos, esos que guardan nuestra historia y un poco de nuestra alma sin que lo sepamos.

Marta Gómez


Colombiana. Sube al escenario sin alardes, sin poses. Pareciera que está en casa. Cuenta cosas, se ríe, habla de los compositores que admira, se burla un poco de su pequeña fama. Luego canta, y cuando canta es como si todo se detuviera, se pusiera en pausa. Su voz, de una limpieza que conmueve, llena de ternura, de verdad, se me mete dentro, me abriga. Marta Gómez.

martes, 6 de agosto de 2019

Toni Morrison (1931-2019)


Lo primero que leí de ella me conmovió. Era la historia de una niña negra que sueña con tener los ojos azules de su barbie. Contó como nadie historias sobre el racismo en su país con un lenguaje poderoso y bellísimo. Sus novelas duelen e iluminan, se clavan en la conciencia. Fue la primera mujer afroamericana en ganar el Nobel. Hay que leerla.

sábado, 3 de agosto de 2019

Mandíbula.


Parece, al inicio, un buen thriller. La chica adolescente que despierta atada, en una cabaña, secuestrada por su maestra de una escuela del Opus. Pero es mucho más. Una mirada aguda sobre lo femenino, sobre el amor-odio que puede surgir entre dos chicas, ese deseo de devorarse, de ser una. la imaginación llevada hasta la orilla de la locura, los rituales secretos del aterrador dios blanco, y esa oscuridad llena de vida que se despierta cuando se deja de ser niña. El lenguaje de Mónica Ojeda es osado, poético, extraño.

Tierra firme. Jan Hendrix.


Un artista es, primero, una mirada. Y su mirada se contagia, te invita a ver la realidad, por un ratito, como el o ella la ve. Jan Hendrix logra eso: mira, me dice, vuelve a mirar eso que sueles no ver, mira cuánta belleza escondida. Entonces miro y me asombro, me conmuevo. Sutil, paciente, profundo.  Al salir del museo mis ojos están llenos de hojas.

La uruguaya


Esa alegría silenciosa de beberte una novela, de reír y preocuparte y entristecerte por lo que le sucede a ese otro hecho de letras. El poder del sexo, o más bien, del deseo, de lo que aún no, de lo que podría ser, de lo que está a punto pero... eso que nos ilumina, lo que nos vuelve idiotas. Breve, divertida, bella novela de Pedro Mairal

domingo, 21 de julio de 2019

Felices los normales

Felices los normales, esos seres extraños,
Los que no tuvieron una madre loca, un padre borracho, un hijo delincuente,
Una casa en ninguna parte, una enfermedad desconocida,
Los que no han sido calcinados por un amor devorante,
Los que vivieron los diecisiete rostros de la sonrisa y un poco más,
Los llenos de zapatos, los arcángeles con sombreros,
Los satisfechos, los gordos, los lindos,
Los rintintín y sus secuaces, los que cómo no, por aquí,
Los que ganan, los que son queridos hasta la empuñadura,
Los flautistas acompañados por ratones,
Los vendedores y sus compradores,
Los caballeros ligeramente sobrehumanos,
Los hombres vestidos de truenos y las mujeres de relámpagos,
Los delicados, los sensatos, los finos,
Los amables, los dulces, los comestibles y los bebestibles.
Felices las aves, el estiércol, las piedras.

Pero que den paso a los que hacen los mundos y los sueños,
Las ilusiones, las sinfonías, las palabras que nos desbaratan
Y nos construyen, los más locos que sus madres, los más borrachos
Que sus padres y más delincuentes que sus hijos
Y más devorados por amores calcinantes.
Que les dejen su sitio en el infierno, y basta.

(Roberto Fernández Retamar)

Roberto Fernández Retamar (1930-2019)


Poeta de una transparencia conmovedora, de lo sencillo. Mirada que te hacía mirar lo cotidiano con su magia escondida. Gracias, poeta.

domingo, 5 de mayo de 2019

Alejandro Unikel (1938-2019)


Alejandro solía decir que pedía al Misterio vivir con plenitud la alegría y con dignidad el sufrimiento. Y así vivió.

domingo, 21 de abril de 2019

La canción de los vivos y los muertos.

Un niño de 13 que cuida a su hermana como si fuera su hija. Una madre incapaz de cuidar a nadie. Unos abuelos. Un fantasma en busca de una historia. Un viaje en carretera. El espeluznante pasado. Con esos elementos Jesmyn Ward crea una novela al mismo tiempo hermosa y brutal acerca de la discriminación, la muerte y los lazos que nos unen. Dulce, amarga, intensa. Con una prosa que empieza límpida y discreta y poco a poco se convierte en una fiesta de lenguaje.  Imposible de olvidar.

18

18 años después, si tú no bailas conmigo prefiero no bailar.